En estos tiempos en que la información cada vez es más fácil de conseguir, donde los clientes han cambiado sus hábitos de compra y donde el cambio de generación cada vez es mas rápido; los departamentos de marketing se han cobrado cada vez más importancia dentro de las organizaciones.

Los departamentos de ventas ya no pueden seguir comportándose como lo hacían hace 10 años. Hoy la tecnología y las plataformas de ventas han desplazado, poco a poco, el método tradicional de vender, atraer y mejorar las ventas. Esto no quiere decir que el vendedor de campo dejará de existir, al contrario: se convertir en úno más eficiente al usar todas las nuevas opciones para conseguir clientes.

No todas la empresas tienen departamentos de marketing, pues tienen la opción de usar agencias de marketing para llegar a clientes que antes no podían. En la actualidad estas empresas no se dedican a anunciar productos o a las campañas publicitarias, sino a atraer clientes a través de metodologías como el inboud marketing.

Éstas combinan las técnicas de marketing y publicidad tradicionales con la finalidad de contactar con un cliente potencial y acompañarlo a través de todo su proceso de compra, durante cada una de las etapas, hasta la transacción final en la que se cierra la venta y comienza la relación para generar lealtad.

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Marketing se ha vuelto una nueva tendencia en cuanto a la forma de vender: cada vez se involucran más estos dos departamentos el uno con el otro, para que los productos y servicios de las empresas se den a conocer más rápido y de una forma más efectiva.

Cuando las áreas de marketing y ventas logran vivir en armonía, la experiencia de venta es única y se refleja en un aumento de ventas, así como la generación de nuevos clientes potenciales y una eficiencia en el costo de vista por cliente.

Es importante mencionar que de lo contrario, el resultado puede ser un caos, pues el área de ventas es el filtro para que marketing pueda ajustarse la forma en que dará a conocer los productos y servicios. En muchos casos podría ser una campaña buena para el consumidor, pero con resultados económicos muy malos para la empresa.

Hay empresas especializadas en ayudar a que los esfuerzos realizados por parte de los departamentos de Marketing, Ventas y, en algunos casos, Recursos Humanos, se vean plasmados en un único esfuerzo. Todo queda concentrado en una sola plataforma que permite reconocer, premiar, informar y educar, tanto a los empleados como a los clientes.

Estas plataformas se han convertido en una herramienta que facilita la operación y manejo de esfuerzos que se hacían aisladamente y han pasado a ser parte de un sistema integral.

Como último punto hay que tomar en cuenta que la información que generan las empresas no sirve de nada, si no hay algún sistema para analizarla. Si no, esa información no será compartida dentro de la empresa para tomar mejores decisiones.